Año Jubilar de la Misericordia

24 de octubre de 2014

Catequesis, un acontecimiento para el encuentro personal con Cristo

Hacer que la iniciación cristiana sea, antes que una mera catequesis de transmisión de contenidos, un acontecimiento que propicie el encuentro personal con Cristo fue la clave sobre la que giró la conferencia pronunciada este martes por el profesor Andrés López Calvo, doctor en Teología Catequética, en el curso que organiza en Santiago el Instituto Superior Compostelano de Ciencias Religiosas (ISCCR). En su intervención, titulada “La iniciación cristiana ante el reto de la Nueva Evangelización”, Andrés López Calvo dijo que es esencial hacer descubrir a los jóvenes la profundidad y belleza de la experiencia religiosa. López Calvo indicó que la fe es un tesoro que hoy necesitada ser interiorizada, personalizada, pasada por el corazón. A su juicio, los creyentes han de ser “más testigos y menos repetidores”.

El profesor de Teología Catequética señaló que el paradigma de la catequesis en este momento histórico tiene que articular cuatro características: ser catequesis de propuestas, ser catequesis más litúrgica, ser catequesis iniciática y presentar orgánicamente el misterio cristiano. La catequesis, aseguró, “debe consistir, no tanto o no solo, en la transmisión de un bagaje de conocimientos, sino en favorecer la comunicación con Jesucristo; su finalidad definitiva es poner a la persona no sólo en contacto sino en comunión, en intimidad con Jesucristo”.

López Calvo recordó, en este sentido, que la catequesis de iniciación debería ser toda aquella actividad dialogada y organizada pedagógicamente, que tiene como objetivo ayudar a las personas y comunidades a apropiarse de la fe y vivirla en sus diferentes dimensiones.

El conferenciante apostó por aprovechar las catequesis de preparación matrimonial de los padres para iniciar este proceso de transmisión de la fe, ya que la familia sigue siendo fundamental para el aprendizaje vivido de la fe, bajo la dimensión del acompañamiento y el propio testimonio. Para López Calvo, la catequesis de iniciación debe apoyarse, además, en una pedagogía de contagio, de inmersión en el testimonio, por lo que la formación de los catequistas “deberá ser ante todo transformación”.